Basado en las enseñanzas de A.C.Bhaktivendanta Swami Srila Prabhupada, fundador acarya de la Sociedad Internacional para la Conciencia de Krishna.
Para apreciar plenamente la cocina védica, se la debe entender en relación con la cultura védica. La palabra Védica, proviene de la palabra sánscrita VEDA que significa conocimiento absoluto. Los vedas son las antiguas Escrituras sánscritas de la India, y se las llama así porque ofrecen conocimiento acerca del Absoluto.
Según los Vedas, el ser humano debe comprender cual es su verdadera identidad y relación con Dios. Esta comprensión védica comienza cuando uno entiende que no es el cuerpo material y temporal, sino el Alma Espiritual y eterna que mora dentro de él. El proceso para revivir nuestra conciencia original y gozosa, y despertar nuestro amor dormido por Dios, se llama BHAKTI-YOGA, o proceso de conciencia de Krishna. Los Vedas son un tesoro de saber en lo que a Krishna y nuestra relación eterna con El se refiere. El estado de conciencia de Krishna penetra, en la cultura vedica, todos las actividades de la vida: no solo el arte, la música, la arquitectura y la literatura, sino también la cocina y el comer.
Lo que distingue la cocina védica de las demás es la conciencia espiritual del cocinero, su conocimiento de que está preparando una ofrenda para Dios. En el Bhagavad-Gita, una de las Escrituras Védicas, Sri Krishna dice que El acepta una ofrenda vegetariana, aunque no sea mas que una hoja, una fruta o un vaso de agua, si se Le presenta con devoción, y debido a Su misericordia inconcebible, El espiritualiza la ofrenda. Lo que era alimento ordinario, se transforma en Krishna-prasada, misericordia de Sri Krishna. Y lo que hubiera sido una comida corriente, se convierte en adoración, un intercambio de amor con el Señor. Cuando comemos Prasada, alimento preparado con devoción a Dios, y ofrecido a Él con amor, nuestros corazones se purifican.
La India es, por tradición, esencialmente, vegetariana, porque su inmortal cultura vedica nos enseña que toda vida es sagrada y que matar animales inocentes, sin ninguna necesidad, es una burda violación de las leyes de Dios. Todas las formas de vida se ven forzadas por las leyes dela naturaleza a elegir su alimento siguiendo sus instintos, sin embargo, el hombre, con su inteligencia desarrollada, al elegir su alimento puede tener en consideración principios espirituales mas elevados. En sus escritos, Srila Prabhupada dice: «Aunque la ley de la naturaleza dice que el ser humano debe subsistir de otros seres vivos, hay que tener en cuenta que también la ley del sentido común, puesto que el ser humano debe obedecer las leyes de las Escrituras. Esto es imposible para los animales».
Los devotos de Krishna son vegetarianos en el estricto sentido vedico de la palabra: no consumen ni carne, ni pescado, ni huevos.
Los devotos condenan todo abuso que se haga de los animales, pero en vez de abstenerse de la leche, que es considerada por los Vedas como esencial para el ser humano, demuestran su compasión de una manera positiva, enseñando el principio védico de la protección de la vaca.
El vegetarianismo es, desde el punto de vista védico, parte de algo mas amplio: la manera natural de comer de quien quiere sacar el mejor provecho de su vida humana. Si seguimos las enseñanzas védicas, ya sea para llegar a ser perfectos espiritualistas o, sencillamente, para purificar nuestros hábitos en el comer, seremos mas felices y ayudaremos a reducir el sufrimiento del mundo en nuestro entorno.
Mas allá de la importancia que tiene respecto de la salud, la economía, la ética, la religión e incluso el karma, el vegetarianismo tiene una dimensión mas elevada y espiritual que puede ayudarnos a desarrollar nuestro aprecio y amor natural por Dios. Srila Prabhupada dice en sus explicaciones de la literatura védica: «El ser humano esta hecho para alcanzar el conocimiento del Yo y, porque este motivo, no debe comer nada que no sea primero ofrecido al Señor. El Señor acepta a Su devoto todo tipo de preparaciones culinarias hechas con vegetales, frutas, productos lácteos y granos. Diversas combinaciones de frutas, verduras y productos lácteos pueden ser ofrecidos al Señor, después de que el Señor acepte los alimentos, el devoto puede participar del prasada, lo que gradualmente mitigará cualquier sufrimiento».
Srila Prabhupada decía a menudo que comiendo prasada solamente una vez, podríamos escapar del ciclo de repetido del nacimiento y la muerte. Y las Escrituras védicas hablan de muchas personas cuyas vidas se transformaron porque comían prasada.
Los Vedas nos informan que la meta de la vida humana es restablecer la relación del alma con Dios, y solo cuando demos el paso desde el vegetarianismo al prasada podremos ayudarnos a alcanzar esa meta.